Varios estudios muestran que la interacción con mascotas puede mejorar la función cardiovascular, estimular responsabilidad e independencia, disminuir la ansiedad, mejorar las relaciones interpersonales, aliviar la depresión, combatir el sedentarismo, aportar compañía y en algunos enfermos permite una más rápida recuperación.
Para la embarazada, el compromiso de tener que pasear a la mascota, obliga a que ella salga a la calle, tenga que caminar y a través de esta actividad que prepare su cuerpo para el parto. El deambular también le ayuda a tener bajo control el peso y mejorar su circulación sanguínea. Otra de las razones por las que podría ser adecuado que una embarazada tenga una mascota es que ésta le hace feliz. Sus ocurrencias, sus juegos y sus atenciones consiguen en algunas personas disminuir la ansiedad por la llegada del futuro hijo. Tener mascotas en el embarazo Por otra parte, las madres con gatos o perros en su hogar durante el embarazo tienen bebés con niveles más bajos de IgE en comparación con las madres que no viven con estas mascotas, apoyando la idea que la exposición a mascotas influye en el desarrollo inmunitario de manera que disminuiría la generación de alergias. Otras publicaciones muestran que la exposición prenatal a perros ayuda a optimizar la maduración de ciertas células del sistema de defensa del organismo del niño. Sin embargo, existen inconvenientes tales como el riesgo de mordeduras, alergias y zoonosis. Las Zoonosis son un grupo de enfermedades infecciosas transmisibles desde animales vertebrados al humano bajo condiciones naturales. Se han descubierto alrededor de 200. Los agentes infecciosos involucrados incluyen bacterias, virus, parásitos, hongos y rickettsias, entre otros. La embarazada no se encuentra libre de contraerlas. Un estudio de tenencia de mascotas en Chile realizado durante el año 2002 reveló que 70% de los hogares de los encuestados poseían alguna mascota. El 54% eran perros, 25% gatos, 15% aves, 3% roedores y 3% animales considerados exóticos., por lo que educar a la población para una tenencia responsable de mascotas, es una prioridad. Pasaremos a enunciar las zoonosis más prevalentes e importantes.
TOXOPLASMOSIS: Es producida por el parásito Toxoplasma gondii, transmitido a través del manejo de los excrementos de gato o ingerir tierra contaminada. La Toxoplasmosis Aguda se da sólo en 1 a 3 de cada 1.000 embarazadas. Se presenta como inflamación de los ganglios cabeza y cuello, dolor de cabeza, fiebre, dolor muscular, dolor de garganta. Si la mujer adquiere la infección durante la gestación puede transmitir la infección al feto. La toxoplasmosis congénita puede producir problemas en el cerebro, ojos, piel y los oídos del bebé, inflamación del hígado e incluso muerte fetal. El daño al cerebro y al sistema nervioso puede fluctuar de muy leve a grave e incluye convulsiones y discapacidad intelectual permanente. El diagnóstico se hace a través de un sencillo examen de sangre en las pacientes embarazadas que tienen contacto con gatos, por lo que no siempre es necesario evitar el contacto con ellos. El tratamiento se basa en el uso de antibióticos.
RABIA: El contagio es por la mordedura de un animal. Los principales animales que propagan la rabia son los perros, murciélagos, coyotes, zorros, zorrillos y mapaches. Producido por el virus de la rabia, habitualmente es mortal. Los síntomas incluyen fiebre, dolor de cabeza, exceso de salivación, espasmos musculares, parálisis y confusión mental. Existe una vacuna para prevenirla.
ENFERMEDAD POR ARAÑAZO DE GATO: Producida por Bartonella henselae. Se presenta como fiebre y ganglios aumentados de tamaño. En más de 90% de los casos existe el antecedente de contacto con gatos. TIÑA: producida por hongos, es frecuente. El 82% de los casos tiene antecedente de contacto con gatos, perros, conejos o hamsters. Es una infección cutánea.
TOXOCARIOSIS: frecuente. Es producida por gusanos (Toxocara) de perros y gatos. La infección la adquieren por ingestión de alimentos contaminados con huevos del parásito. Las larvas se dispersan por los órganos internos del cuerpo e incluso dentro del ojo.
SALMONELOSIS NO TÍFICAS: bacteria Salmonella. Pueden ser adquiridas a través del contacto directo con los reptiles (tortugas, culebras, iguanas), aves (pollos, patos), perros y caballos. Se inicia como un cuadro gastrointestinal que puede evolucionar a septicemia.
LEPTOSPIROSIS: producida por espiroqueta leptospira produce infección a través de la orina se contrae por bovinos, porcinos, equinos y roedores silvestres. En las zonas urbanas, los reservorios son principalmente los roedores y probablemente perros. Se presenta como fiebre, jaqueca, dolores musculares e que puede evolucionar a insuficiencia renal y hemorragia digestiva.
BRUCELOSIS: producido por Brucella spp. Su reservorio lo constituyen los animales domésticos, en particular cabras, ovejas, vacas y cerdos. La enfermedad en nuestro medio se adquiere tras la ingestión de productos lácteos no controlados. Se ve como fiebre prolongada con episodios recurrentes de debilidad y dolores poco definidos. Recomendaciones Para La Tenencia de Mascotas Durante el Embarazo.
También te puede interesar:
- Mascotas durante el embarazo
- Acidez en el embarazo
- La importancia de la ecografìa en el embarazo
- Estreñimiento en el embarazo: medidas para prevenirlo
Comentar a su ginecólogo(a) que tiene mascotas.
- Es imprescindible llevar a la mascota al veterinario, para que le realice un examen exhaustivo y pueda comprobar que tiene puestas todas las vacunas pertinentes. En perros, es vital que ya cuenten con la de la rabia, la del parvovirus y la del coronavirus.
- Es fundamental extremar las medidas de higiene. Eso supone que la embarazada no toque ningún objeto que haya podido estar en contacto con fluidos corporales o heces del animal. • Hay que vigilar que la mascota esté perfectamente limpia y no tenga garrapatas, por ejemplo, ya que estas podrían poner en serio peligro la salud de la mujer y también la de su bebé. Se sugiere desparasitar a los animales a intervalos regulares durante el embarazo.
- Bajo ningún concepto, el animal puede estar en contacto con los alimentos que ingiere la mujer. Es decir, que no lama ni muerda nada que ésta luego se lleve a la boca.
- Por supuesto, hay que evitar que la saliva esté en contacto con la de la embarazada. Los besos que muchas personas le dan en la boca a su mascota, deben abandonarse porque eso podría provocar que la gestante adquiera infecciones y enfermedades varias.
- Si la rutina de su mascota va a cambiar, es mejor que esto suceda antes de que el bebé regrese a casa. De esta manera, la mascota no asociará los cambios con la llegada del bebé. Algunos conductistas sugieren el uso de una muñeca e incluso salidas con el coche de paseo para acostumbrar a la mascota.
- Atienda a la mascota en un horario que sea realista y se pueda mantener después de que el bebé nazca y asegúrese de cumplirlo. Es deseable que su animalito haga ejercicio todos los días, con usted o con otra persona. Es importante delegar y compartir la responsabilidad con otros miembros de la familia.
- Si el perro tira demasiado al pasear, un collar de cabeza como Halti o Gentle Leader debería controlarlo, pero debe estar ajustado correctamente. Sería buena idea entrenarlo antes del parto porque cuando llegue el bebé, necesitará tener una mascota confiable que responda a los comandos verbales básicos.
- Si tiene amigos o familiares cuyos bebés lo visitan, téngalo en cuenta y observe las reacciones de sus mascotas hacia ellos.
- Debe proporcionar a su mascota actividades regulares que puedan hacer cuando no esté allí o cuando esté ocupado. Estas actividades se conocen como enriquecimiento ambiental. • Permita que su mascota explore las áreas de dormir y de vida del bebé para que se familiarice con los nuevos olores que le parecen interesantes. (crema, talco, cuna).
- Si su mascota intenta agarrar o arrastrar cualquiera de los artículos para bebés, retírelos. En lugar de tratar de sacar algo de la boca de la mascota y arriesgarse a convertirlo en un juego de tira y afloja, cambie el artículo por un regalo o uno de los juguetes de su mascota.
- No permita que su mascota duerma en los muebles del bebé ni que juegue con sus juguetes.
- Si tiene una tortuga, trate de evitar tocar el animal y el agua en la que nada. Asegúrese de usar guantes cuando limpie el tanque o cambie el agua.
- Particularmente para evitar la Toxoplasmosis medidas más específicas corresponden a: Consumo de carnes bien cocidas. Pelar o lavar cuidadosamente frutas y verduras. Lavarlas manos, cocina, y utensilios de cocina después de manipular carne cruda, frutas y verduras. Uso de guantes al contacto con tierra, por ejemplo: labores de jardinería. Evitar todo contacto con heces de gato. Si es absolutamente necesario que la embarazada realice estas labores: usar guantes y cuidadoso lavado de manos posterior a ello. Manejo cuidadoso de los gatos domésticos, considerando que se cursa un embarazo: No adquirir gatos durante el embarazo. Mantener los gatos domésticos dentro de la casa. No alimentar gatos con carne cruda.
CONCLUSIÓN: En muchos casos las mascotas son un miembro más de la familia y con los cuales creamos un sólido e indiscutible lazo de unión y afecto. El proceso de compartir con ellos la espera de un hijo puede llegar a ser maravilloso e inolvidable. Sólo debemos asegurarnos de tomar las debidas precauciones
Dra. María José Alvarez
Ginecóloga obstetra
Calificación!
Promedio de puntuación / 5. Recuento de votos: